Bitácora para una despedida

Proyecto de fotografía terapéutica y participativa para hablar sobre el cierre de la escuela Polinyà

¿Puede la Fotografía Vivencial y Participativa ayudar a una comunidad escolar a transitar el cierre de la escuela?
Si, no solo que ayuda a transitar el duelo del cierre sino que se genera un espacio de interacción, comunicación y creatividad entre los estudiantes, entre estudiantes y profesores y también en las familias de la escuela que ayuda a poder hablar de ello y compartir experiencias.

Ese ha sido el caso del último proyecto de Fotografía Vivencial y participativa, «Bitácora para una Despedida» que realicé en la Escuela Polinyà.

El objetivo del proyecto era crear un espacio creativo y dialógico entre los niños y entre niños y maestros y dar espacio para conectar con las emociones que genera la despedida de la escuela desde un
espacio posibilitador.

El resultado ha sido revelador, más allá de lo que se ha compartido. En las imágenes quedaba en evidencia qué era lo más importante para los niños y niñas de la escuela.

Las historias detrás de cada fotografía abrían un universo interior dispuesto a ser compartido y expandido mientras el dolor del cierre de la escuela que era el motor del proyecto devino con el paso de los días en impulso que animó a los niños a ir adelante, a renovar sus expectativas y predisposición a un cambio que si bien no pidieron…. podrán también crecer a raíz de esta experiencia.

Comparto una pequeña muestra de fotografías y vídeo con testimonios de algunos niños de la experiencia.

¿Quieres aplicar Fotografía Vivencial® a tu proyecto?

Porque la filosofía y punto de partida de la Fotografía Vivencial® es conocer a fondo, sentir, e interiorizar todo sobre la persona que crea el proyecto y el proyecto en sí.